Murcia sostenible

Escrito por 30 abril 2015 0 4

Escucho y leo cada vez con mayor frecuencia la palabra sostenible aplicada a nuestra ciudad, y no sé por qué.  Al principio pensé si lo dirían por el SOS, ya saben: SOS – tenible, que tenemos el SOS, pero deseché la idea porque un festival drogo alcohólico musical que sólo molesta 48 horas no tendría suficiente empaque como para calificar a una ciudad entera. Se me ocurrió, después, si sería por el tranvía; ya saben ese medio de transporte en superficie que no contamina al ser eléctrico. Claro, no contamina él pero, al tener prioridad absoluta sobre el resto de vehículos motorizados, hace que éstos tengan que esperar pacientemente en plazas, cruces, redondas, etc. a que su alteza real el gusanito verde se digne a pasar lenta y majestuosamente, casi siempre vacío, formando unas buenas retenciones que, eso sí, gracias a la perfecta sincronización semafórica por la cual te pueden pillar los tres semáforos de una misma calle, se diluyen rápidamente. Aunque tengo mis dudas respecto a que el tranvía no contamina porque, ¿qué nombre le daría usted a la colocación de cientos de vigas de hierro de 4 o 5 metros de altura, cables, tensores, poleas, ruedas dentadas, semáforos, señales, contrapesos, catenaria, ….en las arterias principales de la ciudad?

Consultado el palabro en la RAE dice: Que se puede sostener, mantener firme algo, sufrir, tolerar.  Y debe ir la cosa por ahí. Porque aquí nunca pasa nada, todo se mantiene, todo se sufre, todo se tolera. Que te garabatean la fachada de tu casa recién terminada: no pasa nada llamas al pintor o al albañil y te la arregla y la deja lista para el siguiente mamarracho. Que el grafiti afecta a una señal de tráfico, un edifico oficial o un monumento del siglo diecisiete: no pasa nada. ¿Cómo iba a saber el grafitero que era del siglo diecisiete si ponía en el cartel una  equis, una ve baja y dos palotes?  Que las putas del barrio te invitan a echar un ratito a cualquier hora del día cualquier día del año: no pasa nada. En sus países no pueden hacerlo pero aquí sí; somos más tolerantes que nadie. Que te ponen un bar en los bajos de tu casa y no dejan dormir a nadie: no pasa nada. Crean riqueza y hay que dejarlos. Y digo yo: ¿es que los que no podemos dormir somos unos tarados gandules que no trabajamos y no contribuimos a subir el PIB? Que te atropella una bici en la calle peatonal por excelencia de la ciudad: no pasa nada. La culpa la tienes tú por ir pendiente de tu nieta de 2 años en lugar de ir mirando hacia atrás a ver si viene una bici o un monopatín, aunque a éstos por lo menos los oyes por el ruido que hacen. En los 60 había más bicis que ahora pero estaban reguladas: tenían que llevar luz blanca delante, luz roja y un piloto reflectante detrás, matrícula y circular por la calzada. Las calles peatonales las pasabas bajado de la bici, caminando, que también dicen que es muy sano,  llevándola del manillar. Ahora no. Ahora van por la calzada en dirección coincidente o contraria. De la calzada pasan a la acera, de la acera a la calzada, se lanzan por los pasos de peatones como si fuesen un peatón más, no respetan los semáforos, circulan de noche sin luces… y no pasa nada. Pero es que, claro, si las haces circular por la calzada las conviertes en el eslabón más débil de la cadena. Por eso lo mejor es convertir a los peatones en el eslabón más débil de la cadena de manera que tendremos que exigir la creación de un carril-peatón. En esto sí que seríamos punteros: Murcia crea el primer carril-peatón del mundo. Que los mendigos funcionarios tienen copados todos los accesos a los pocos monumentos de la ciudad, aparcamientos, supermercados, etc. y no pasa nada: le dan a la ciudad otro aire que le viene muy bien al turismo.  Lo de funcionarios lo digo porque tienen las plazas en propiedad.

Y cuando le comentas algo de esto a un agente de la autoridad te dice con resignación: es que la ordenanza…….. Pero bueno,  ¿me sugiere usted que estas cosas y muchas más que no me caben aquí: el acoso de los gorrillas, la mendicidad cuando sales a comer o a cenar, la suciedad permanente en las calles, la altura de los bordillos, dormir en los cajeros… no se arreglan por culpa de la ordenanza? ¿Tengo que entender, señores políticos, que llevan 600 siglos con mayoría absoluta en la ciudad, que no han tenido tiempo o que no pueden adaptar, mejorar o actualizar la ordenanza?  Y, por favor,  no me digan que allí o allá o acullá están peor. No me sirve.

Todavía tendrán la jeta de echarte su foto en el buzón para que vayas a votarles y conseguir que siga sin pasar nada otros cuatro años.

Artículo publicado en La Verdad de Murcia el 2 de mayo de 2.015.

No hay comentarios todavía.

Escribrir una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *