Al frente del Ministerio para la Propaganda controlaba, orientaba, censuraba. Nada escapaba a su control: prensa, radio, cine, teatro repetían su ideario. Cuando Alemania ardía por los cuatro costados y su derrota en la Segunda Guerra Mundial era inminente, Göbbels, con su discurso apasionado y feroz, conseguía que la audiencia creyera que la victoria era posible. Su fanatismo era tal que acabó creyendo sus propias mentiras, y a él se le atribuye la frase de que una mentira repetida mil veces se convierte en una verdad.
Desde hace mucho tiempo, y ahora mucho más frecuentemente que antes debido a la necesidad del voto independentista catalán para sacar adelante los Presupuestos, escucho a los líderes independentistas decir que ahora son un 47 o 48% pero que cuando sean más del 50% Cataluña será independiente del Reino de España y se convertirá en una república. El Sr. Tardá acepta que posiblemente no lo sean ya, pero que con el paso de algún tiempo (en el que aumentará el número de jóvenes adoctrinados con derecho a voto) superarán esa cifra y Cataluña será independiente y se convertirá en una república. Esto lo dice y repite hasta la saciedad ante la prensa, radio y televisión. También en el Congreso. Y cuando lo oigo espero, sin conseguirlo, que algún contertulio o algún diputado que lo tiene cerca le diga que ni con el 51 ni el 72 ni el 89 % serán ni independientes ni una república. Que porque repita esta mentira mil veces no se va a convertir en realidad. Porque Cataluña no es de los catalanes, Sr. Tardá, como la Trapería no es de los que viven allí, ni la Gran Vía de Madrid es de los que viven allí, ni Cuenca es de los que viven allí, ni Andalucía de los que viven allí. Que somos un todo y que Cataluña es tan suya como mía y, por extensión, de todos los españoles, como el resto de España es también de los catalanes. No asocie usted ideal con propiedad y no engañe a sus votantes porque no pueden decidir qué hacer con lo que no es suyo.
A ver si alguien se lo explica despacico para que lo entienda y deja ya el cuento de la república. Si ustedes son más gobernarán con sus ideas republicanas, que son tan legítimas como las demás, pero dentro de la Constitución, sin establecer nuevas fronteras.
Este comentario fue publicado en el diario La Verdad, de Murcia el 25-10-18.
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